Es frecuente encontrar padres que se
quejan de las rabietas que tienen sus hijos, sobre todo cuando éstas aparecen
en lugares públicos o reuniones familiares. Pero ¿qué entendemos por “tener una
rabieta”?
En primer lugar hay que señalar que
las rabietas son algo normal y evolutivo. La etapa en la que se presentan con
más frecuencia es de los 1 a los 3 años, coincidiendo con la adquisición del
lenguaje.
Se consideran rabietas a los
estallidos de frustración o ira como consecuencia de una falta de control
emocional por parte del niño. Normalmente, aparecen cuando no son capaces de
comunicar sus necesidades o cuando no ven satisfechos sus deseos. En estos
casos aparecen conductas como escupir, pegar, patalear, gritos, insultos,
lloros… Todos estos comportamientos son muy molestos y estresantes para los
padres, por lo que se suele ceder a las exigencias del niño para acabar con esa
situación. Pero debemos saber que aunque
a corto plazo parezca la solución, a largo plazo se convierte en un problema
mucho mayor.
Pautas para hacer frente a las
rabietas:
ü Tómate tiempo para relajarte. Eres el
modelo de tu hijo, si tú pierdes el control ante la frustración, es probable
que el aprenda a hacer frente frustración del mismo modo.
ü No quites valor a la causa de la
rabieta. Evita comentarios como “¿por
esta tontería te pones así?” o “pareces un energúmeno”
ü Proponle alternativas a la reacción
que está teniendo. Por ejemplo: “intenta
relajarte y cuéntame qué es lo que te ocurre o vete a tu dormitorio y cuando
estés más tranquilo hablamos”
ü Si el niño es pequeño y continúa muy
nervioso, llévalo fuera y espera a que se relaje. Es esperable que tras unos
minutos, el niño comience a tranquilizarse. Durante el periodo que dure la
rabieta, ignora su comportamiento y sólo está receptivo cuando se comunique de
forma adecuada.
ü Indaga sobre qué situaciones provocan
rabietas, para enseñarle a hacer frente a ellas.
ü Intenta prevenirlas, por ejemplo:
cede en aspectos poco importantes, ofrece distintas opciones, dirígete a tu
hijo de forma amistosa cuando le des una orden…
Como
decíamos al principio, las rabietas son algo normal que tienden a suavizarse
con el paso del tiempo pero que se controlen antes o después, depende en gran
medida de nuestra actitud y autoridad como padres.
Paula Gordillo
No hay comentarios:
Publicar un comentario